La inteligencia artificial no solo es un avance tecnológico más, ha revolucionado la vida cotidiana, y está acelerando la evolución de todas las industrias, y la logística no es la excepción. Su aprovechamiento está abriendo un gran abanico de posibilidades que representan, en muchos casos, cambios radicales en la operación de los sistemas logísticos en todas las etapas y fases de la cadena.
Incluso, desde la planeación misma, con el uso de IA, de la mano del big data, las organizaciones están logrando ser más pro-activas, al deducir la intención que tienen los usuarios de consumir ciertos productos, es decir, ahora cuentan con la capacidad de prever la demanda de sus mercados, y con ello, de adaptarse con anticipación y actuar en consecuencia con una logística para evitar tanto la falta de stock como los excesos de almacenamiento, ahorrando así los recursos que ello representa.
Como consecuencia, cada vez es más asequible la operación para los gestores de cadenas de suministro y profesionales de la logística, que también se traduce directamente en crecimiento y ventajas competitivas para las empresas.
Pero hay aplicaciones concretas de la IA que están marcando la diferencia en la logística. Por ejemplo:
1. Almacenes automatizados
Los almacenes son el corazón de la logística, y sus procesos representan grandes retos y áreas de oportunidad. Con inteligencia artificial, potencializando un software de gestión con robótica aplicada, es posible automatizar operaciones como el transporte y la colocación de productos, asignando solo los recursos necesarios para ello.
Incluso, existen “almacenes inteligentes” donde la inteligencia artificial permite visualizar los datos de los objetos. En realidad, es posible automatizar prácticamente el día a día entero de un almacén.
Un buen ejemplo son los almacenes con plataformas en línea, que utilizan inteligencia artificial para automatizar procesos como la recepción de sus mercancías y el embalaje de las mismas. Con un reconocimiento de objetos sin códigos de barras, se acomodan los productos tras descargarlos de los contenedores. Rápidamente, mientras que se realiza un embalaje 3D, los productos pueden medirse simultáneamente por medio de IA y visión por computadora, igualmente sin necesidad de escanear códigos de barras.
2. Automatización y visibilidad de la cadena de suministro
En las cadenas de suministro, muchos procesos son susceptibles de automatizarse con IA, desde el seguimiento de pedidos y la actualización de inventarios en tiempo real, hasta la emisión de órdenes de abastecimiento; al mismo tiempo que se mejora la trazabilidad de las mercancías. Cabe recordar que, en general, invertir en tecnología optimiza la cadena de suministro.
3. Coordinación del transporte
Con IA se pueden trazar las rutas óptimas para las entregas, y también recalcularlas y/o modificarlas en tiempo real de ser necesario.
Poder visualizar y dirigir los traslados que se hacen de las mercancías, permite a su vez una mejor gestión de los almacenes.
4. Aumento de la productividad
La utilización de algoritmos y cálculos automáticos permiten generar mejores soluciones para aumentar significativamente la productividad que hay en el almacén, en especial para los retailers online. Además, ya hay robots controlados por IA que aseguran una comunicación simultánea y prácticamente sin errores, lo que también contribuye a este aspecto.
5. Procesamiento contable
Una IA tiene la capacidad de encargarse de funciones esenciales del negocio en volúmenes mucho mayores, por ejemplo, procesar millones de facturas, de miles de vendedores, socios y proveedores, restando una gran carga a los equipos contables de logística.
Además, las tecnologías de IA como el procesamiento de lenguaje hablado son capaces de extraer información esencial, como importes de facturación, información de cuentas, fechas, direcciones y partes involucradas, de entre la multitud de facturas que recibe la empresa.
Una vez clasificados los datos, un bot de RPA (automatización de procesos robóticos) puede extraerlos e introducirlos en el software de la empresa para generar una orden, ejecutar un pago y enviar al cliente una confirmación por correo electrónico, todo ello sin intervención humana.
Incluso ya hay sistemas con estas tecnologías que pueden utilizarse para la detección de facturas fraudulentas.
Algunos beneficios de integrar IA a la cadena de suministro
Automatización de tareas
Existen sistemas de visión artificial capaces de identificar errores o predecir necesidades, alertando también al personas humano a resolverlos, lo que agiliza el proceso de gestión de mercancía en almacenes para hacerlo en el menor tiempo. En este sentido, la inteligencia artificial también puede utilizarse para programar o ejecutar tareas de mantenimiento en almacenes y transporte.
Organización de la demanda
Conocer con anticipación lo que necesitan los clientes es un factor crucial para optimizar la cadena de suministro. Esto se logra conociendo datos extraídos por la propia empresa, pero también insights sobre tendencias macroeconómicas, estadísticos y de consumo que ayudan el mejor manejo de la cadena de suministro.
Los modelos de IA incluyen componentes predictivos con los que se puede adaptar la planificación a las diversas situaciones, tanto en la propia cadena de suministro como en respuesta a la evolución de los mercados mundiales, como por ejemplo, cambios en la demanda, fluctuaciones en los precios, cambios de proveedores, etc.
Esta naturaleza predictiva de la IA permite planificar con anticipación, es decir, el sistema aprende de estos cambios y mejora con el tiempo.
Resuelve problemas de logística
La IA arroja modelos con una descripción más detallada para resolver problemas logísticos. Si se añaden fases de experimentación y simulación, su validación se acerca más a la realidad.
Por ejemplo, en el transporte, combinar inteligencia artificial con analítica y big data ayuda a reducir costos, al igual que contribuye al arrojar información pertinente para mejorar los indicadores de sostenibilidad de la empresa.
Ayuda en la gestión de almacenes y existencias
Si se gestionan los SKU dentro del inventario, a través de IA se puede localizar productos en tiempo real, dar seguimiento de ventas, conocer el estatus del inventario, predecir necesidades en la demanda y detectar errores o estafas en la cadena de suministro.
Permite llevar un control de proveedores
Los tiempos de entrega de los proveedores afectan directamente la efectividad y productividad de la cadena de suministro. Con inteligencia artificial y analítica se puede responder rápidamente a estos imprevistos, e incluso anticiparlos, dando un reporte de lo que podría llegar a ocurrir en la cadena completa. Un ejemplo es la construcción de gemelos digitales para tareas predictivas y de diagnóstico.
Solistica integra IA en sus todos sus procesos: en almacenaje cuenta con sistemas automatizados que permiten ahorrar espacio y gestionarlo inteligentemente, así como reducir el tiempo de maniobras al máximo; y en transporte, con sistemas para la optimización de rutas, gestión de riesgos y mantenimiento de flotas.
En síntesis, los aportes de la IA a la cadena de suministro ya sea en su etapa de almacenamiento, transporte de carga o última milla permiten a las empresas hacer más eficiente y confiable la operación logística.
Utilizada estratégicamente, la IA puede reducir errores, minimizar riesgos y operaciones repetitivas, y a la vez ofrecer muchas aplicaciones que pueden acelerar la logística y en última instancia, aumentar la competitividad. Seguramente su uso va a continuar creando un impacto importante en los procesos logísticos en el futuro próximo.