La digitalización y las nuevas tecnologías, como el internet de las cosas y el aprendizaje autónomo, han evolucionado a todas las industrias, incluyendo la industria logística que, a lo largo de los años, se ha caracterizado por adoptar soluciones innovadoras que le permitan responder de manera precisa, rápida y segura.
Ejemplo de ello es el dron, una herramienta que ha sido empleada alrededor del mundo para cuestiones militares, de beneficencia o cinematográficas, y que ahora empieza a ser aprovechada por la industria logística para eficientizar y optimizar sus procesos.
Estos pequeños aparatos —que pueden volar casi 90 minutos y trasladar paquetes de hasta 3 kilogramos— se han comenzado a utilizar en la última etapa de la cadena de suministro, es decir, en el trayecto entre el mensajero y el destinatario, en zonas donde los transportes tradicionales no pueden ingresar.
Si bien esta tecnología apenas empieza a ser aplicada por las compañías en sus almacenes, las pruebas piloto sugieren que esta aeronave no tripulada tendrá diferentes usos en la cadena de suministro: como medio de transporte para trasladar mercancías pequeñas y ligeras en lugares con difícil acceso; como verificador de inventarios en almacenes o exteriores; y como cámara de vigilancia aérea que brindará visibilidad y seguridad a las mercancías.
Aunque aún no se comercializan para estos fines, ya se conocen algunos beneficios que los drones podrían proporcionar a la logística empresarial:
- Reducción de gastos de envío y operativos
En los próximos años las compañías podrán enviar productos desde sus almacenes hasta sus clientes en menos de 30 minutos a un costo mínimo.
- Ahorros relacionados con la transportación
Al emplear drones en las operaciones diarias, las compañías disminuirán drásticamente sus gastos en mano de obra, mantenimiento, combustible y seguros, entre otros.
- Disminución de problemas relacionados con las devoluciones
Los drones no sólo podrán contribuir a reducir el tiempo en que un artículo devuelto regresa al almacén, también podrán ofrecer una mejor experiencia al cliente al evitarle ir a una paquetería para regresar su pedido.
Los principales inconvenientes a los que posiblemente se enfrentan las compañías al implementar estas nuevas herramientas serán las limitaciones tecnológicas. Debido a que actualmente son muy frágiles, sólo pueden apoyar en el traslado de paquetes pequeños en distancias cortas. Además, tendrán que ser operados por personal previamente capacitado y calificado, lo que podrá generar una inversión extra.
Otros obstáculos por considerar son la seguridad física e informática, al ser máquinas controladas por computadores se vuelven blanco de hackers que buscan robarlos o destruirlos; y las regulaciones gubernamentales de cada país que podrán incluir restricciones, permisos especiales, tenencias y reglas que dificulten su utilización.
Por otro lado, el tema de la responsabilidad legal aún no está claro. Todavía no se ha determinado totalmente en quién recaería la responsabilidad en algún accidente o problema de seguridad. Por ejemplo, si cayera un dron por una falla técnica y lastimara a alguien, no se sabría si la falta caería en el proveedor o en la aseguradora.
Es recomendable que las empresas que deseen implementar drones en sus procesos logísticos tengan periodos de prueba exhaustivos para que los colaboradores puedan detectar diferentes problemas. Generalmente los proveedores de drones también diseñan el software requerido para operarlos, por lo que es aconsejable solicitarles periódicamente capacitación y soporte. También es conveniente introducir este tipo de herramientas de manera paulatina para poder solucionar los problemas a medida que surjan y evitar así un daño mayor.
Si bien las compañías especializadas en logística en nuestro país aún no ofrecen ni comercializan servicios logísticos a través de drones, sí se están preparando con pruebas pilotos y analizando aspectos técnicos, económicos y regulatorios, para poder hacerlo en un futuro no muy lejano.
Cada vez más, es evidente que la tecnología de los drones se vuelve accesible para los operadores logísticos que se ocupan no solo de las actividades de entrega de pedidos, sino también de ofrecer servicios de almacenamiento. Combinados con un buen software logístico, los drones mejorarán drásticamente la eficiencia en varios puntos de la cadena de suministro en los próximos años para poder ofrecer a las compañías un nuevo servicio de valor.
